El corazón de las personas que cantan en un coro late al unísono y sus emociones se sintonizan. No solo tienden a moverse irresistiblemente al unísono al ritmo de la música (por más que el manual de buenas maneras del cantante de coro lo desaconseje), sino que sus corazones laten también a la vez. A los pocos minutos de empezar a cantar su pulso se acompasa y como consecuencia:

En la práctica orquestal, en el trabajo colectivo está la esencia de nuestros objetivos. La orquesta siente que está cumpliendo una misión que trasciende el individualismo artístico, que trasciende al ego y que se sitúa en un plano mucho más generoso, mucho más humanístico, mucho más moderno y contemporáneo.

Mucho más a tono con la exigencia actual del arte, que es el de convertirse en un instrumento de desarrollo para el ser humano y no en un exclusivo campo de desarrollo o de cultivo del ego, de una estética encerrada en sí misma, o intranscendente.

Los músicos no estamos hechos para el trabajo individual. Nuestro deseo de participar en un grupo instrumental o vocal se acrecienta cuanto mayor es nuestro conocimiento sobre la práctica instrumental. Desde niveles iniciales es conveniente que nuestros alumnos se inicien progresivamente en la interpretación musical colectiva. Además, esta les proporciona valores esenciales para la convivencia social como el respeto por el trabajo de los demás, la puntualidad, la responsabilidad, la planificación en el trabajo…

Por esto proponemos esta actividad nueva que consistirá en una clase colectiva con otros alumnos y especialidades, que se desarrollará una vez al mes y de matrícula trimestral. Esta actividad pretende ser el hall de entrada a la Joven Orquesta Escuela o la Escolanía y además contará con una categoría propia en el concurso de solistas.

SE REALIZARÁ MATRICULACIÓN AL COMIENZO DE CADA TRIMESTRE.

Para esta actividad el coordinador se pondrá en contacto con los interesados para comunicarles el material necesario para el desarrollo de la actividad.